Cheon Seju no tuvo más remedio que unirse a una organización criminal para vengar a su hermana menor muerta. Mientras estaba perdiendo la esperanza en la vida, conoció a un chico que le recordaba a su hermana menor y le mostró un pequeño acto de bondad. Si hubiera sabido que su corazón alegre se volvería tan pesado, no lo habría ayudado. "Te dije. Tú siempre fuiste primero... … .” La mirada siempre aguda se ha vuelto opaca hoy. Los ojos de Cheon Seju eran suaves, dulces y profundos. "Así que asume la responsabilidad". En todo, Cheon Seju quedó primero. Él fue el primero que le tendió la mano y lo observó con cuidado. Sejin tomó su mano cuando la extendió y únicamente lo miró porque él lo miró, luego se enamoró de ese dulce hombre. Sejin ya no quería ver a Cheon Seju alejándose de su lado. Si no puedes venir, yo iré. "Todo lo que me queda ahora eres tú...”